Alba Villén

Persona, ser y África

1.- ¿Dónde vives?

Ahora vivo en Nairobi

2.- ¿Desde cuando viajas/vives a/en África?

Al continente africano desde 2011 y a África Subsahariana desde 2014

3.- ¿Por qué África?

Pura debilidad por este continente desde que tengo conciencia. Todo es tan diferente, variopinto y auténtico que atrapa, así que hoy me siento una completa afortunada

4.- ¿Ha cambiado tu visión de este continente de la primera vez que llegaste a ahora?

Mi visión ahora es más amplia, soy más consciente de que hablamos de 55 Áfricas, una por cada país. En el resto de los sentidos no ha cambiado, sino que se ha afianzado mi idea de que es una potencia cultural, social y económica y 55 lugares impresionantes de los que aprender.

5.- Una buena vivencia.

Cualquier atardecer en los campamentos de refugiados saharauis de Tinduf, en buena compañía.

6.- ¿Y una no tan buena?

El Gobierno de Kenia dispersó el pasado noviembre una manifestación pacífica contra la corrupción gubernamental lanzando gas lacrimógeno contra los manifestantes y los periodistas que estábamos allí. Tuvimos que huir a través de una alambrada de espino y acabé en el hospital. A la semana siguiente volvió a suceder (yo ya no estaba allí). Sentí mucha admiración por personas valientes que quieren cambiar las malas gestiones de sus gobiernos, pero mucha frustración por la forma en la que la policía nos trató, gaseando su derecho a expresarse libremente y mi derecho a dar voz a lo ocurrido.

7.- Un plato africano

Mejor dos: carne de camello con cuscús saharaui o siro etíope (pero no muy picante).

8.- Un libro sobre África

Un grandioso topicazo: “Ébano” de Kapuscinski.

9.- Ciudad favorita

Lamu (en el noreste de la costa keniana). Un paraíso de calles estrechas, donde retumba el sonido de las mezquitas, que aún utiliza burros en vez de coches y en el que siempre es un buen plan perderse por su hermosa costa con una barquita.

10.- Una canción africana

“La tierra derrama lágrimas” de Aziza Brahim. En español solo tiene el título, es un canto, en lengua hasanía, contra el olvido de los mártires que derramaron su sangre para conseguir la libertad del pueblo saharaui.

11.- Una película sobre/de/desde África

Un documental: Hijos de las Nubes de Javier Bardén y Álvaro Longoria, una radiografía de la situación actual e histórica del pueblo saharaui.

Periodismo

1.- África sale en los medios españoles de una manera muy residual y negativa, ¿a qué se debe?

Creo que se debe al poco interés político, mediático y en consecuencia de la ciudadanía también. “Un beso separa la boca de África de los labios de Europa”, decía el poeta Liman Boicha, y sin embargo parece tan infinitamente lejos. Es una espiral: los medios generalistas no educan a la sociedad para que se interese por lo que sucede en África, y la sociedad, que no se interesa por lo que sucede en el continente, no consume la información que hay.

2.- ¿Crees que la manera de contar África en los medios españoles es la adecuada? En caso de que no, ¿Cómo debería ser? En caso de que sí, ¿Por qué?

Para nada es la adecuada. Es insuficiente y la que llega hasta el lector es mayormente negativa. No logro entender por qué un atentado en Alemania con 12 muertos acapara portadas durante días y el atentado de Nigeria, con 50 muertos, solo sea publicado en una agencia de noticias. Hay falta de ética, interés, recursos y profesionalidad en la manera en que los medios generalistas españoles están informando sobre África.

Además los medios sobreviven con un colaborador (ni siquiera les brindan la estabilidad de un corresponsal) para todo el continente, o con periodistas informando desde Madrid, despedazando una nota de prensa de Amnistía Internacional o Human Watch Right.

Los grandes medios están dejando atrás revoluciones sociales, tecnológicas y políticas para seguir hablando del pobre niño negro de tripa hinchada. Es hora de reestructurar la información del continente africano en español, es deber de los medios educar a la ciudadanía y despertar el interés por este continente.

3.- Cuando ocurre algo con repercusión mediática internacional en África y no hay un periodista español en el terreno muchos critican la ausencia de corresponsales en el continente. Si fueras el jefe de Internacional de un medio y te permitieran “colocar” a cuatro corresponsales en África subsahariana, ¿Dónde lo harías? ¿Por qué?

Cuatro periodistas no pueden cubrir más de 40 países. Trasladémoslo a nuestro país, ¿cómo veríamos que un corresponsal contara lo que sucede en España desde Polonia? Hay que terminar con este modelo. Se necesita mínimo un periodista por país para ofrecer una información de calidad. La información es una responsabilidad social que tenemos con la sociedad.

Creo que no es ningún disparate y que con voluntad es ejecutable, yo tengo la suerte de contar con un compañero periodista en casi todos los países de África Subsahariana.

4.- ¿Cuáles son los temas que más consigues vender a los medios?

Personalmente nunca me han dicho no a ningún tema que haya propuesto, pero como agencia de noticias puede que no seamos un ejemplo representativo de lo que el resto de compañeros de los grandes medios españoles consiguen vender: conflictos y catástrofes.

5.- ¿Qué tipo de temas te gustaría publicar más?

Hoy en África apuesto por temas sociales: revoluciones del pueblo contra sus Gobiernos, historias de superación, relatos pequeños en sitios pequeños y crónicas que ayuden a acabar con los estereotipos. Aunque, ya digo, me permiten publicarlas.

6.- Desde España nos imaginamos al periodista en África como un ‘Indiana Jones’, ¿Cómo es tu día a día como periodista en África?

La vida de un corresponsal en África puede parecer exótica, pero la mayoría del tiempo es aburridamente normal. Por supuesto que, hacer una crónica en profundidad, lleva más tiempo y dificultad que en países como España. A eso hay que sumar cortes de internet y electricidad, horas de espera en ruedas de prensa, otro idioma, que no sea frecuente poder levantar un teléfono y conseguir la información… pero nada que no se pueda conseguir con paciencia y empatía.

De todas maneras hay un abismo entre la forma de vida de un barrio acomodado de Nairobi o cualquier slum (barrio chabolista) donde vive la mayoría de la población en países como Kenia. También hay una gran diferencia entre las facilidades de la capital o las de zonas rurales. Y no creo que muchos periodistas vivan en un slum. Entramos y salimos, pero no vivimos allí. Puede que allí fuera algo más “Indiana Jones”.

7.- A menudo nos olvidamos de los periodistas locales en el continente, ¿qué opinas del periodismo hecho sobre África por los africanos?

Yo cuento con decenas de compañeros, periodistas locales, con los que hablo e intercambio información a diario en inglés, francés y portugués, todos ellos cubriendo sus países in situ para EFE. Desde Nairobi recibimos esa información, la traducimos y adaptamos al lenguaje de agencia de noticias. Esta experiencia me permite aprender a diario del periodismo hecho sobre África por los africanos, con ello he descubierto que el aspecto cultural es importante para hacer una información de calidad, es decir, creo que un periodista local entiende mejor el contexto que un expatriado, y una combinación de los dos me parece también acertada.

Aparte de esta experiencia, asisto asombrada al encomiable cometido de los periodistas africanos y su imprescindible trabajo en las revoluciones políticas, sociales y económicas que afronta África. Sin embargo, como en otros tantos lugares del mundo, a los periodistas nos queda una larga batalla por la libertad de expresión, en la mayoría de los casos contra los gobiernos que nos reprimen. A veces el trabajo de mis compañeros en países como Somalia, Mozambique o República Democrática del Congo es realmente complejo.

8.- Un personaje que haya cambiado la historia de África. No se vale Mandela.

Nadie puede cambiar la historia de 55 países, cambiar la historia de uno solo ya es suficiente. Me quedo con la figura de la mujer saharaui, un icono de mujer musulmana y árabe, progresista y empoderada por su sociedad que la considera un pilar fundamental tanto en la familia como en la causa política de su país. Entre ellas destaco a Omeima Abdeslam, representante del Frente Polisario en Suiza y las Naciones Unidas en Ginebra.  A diario denuncia las violaciones de derechos humanos de su pueblo con una sensibilidad digna de admirar. Es una mujer que defiende el derecho a la libertad del pueblo saharaui ante los despachos de la comunidad internacional, y sigue a la misma vez teniendo los pies tan llenos de arena.

Facebooktwittergoogle_pluspinterestlinkedinmail