Mirad las siguientes fotos y decidme qué veis.
‘Niños pobres’, diréis algunos.
Un negocio, señores. Lo que vemos en estas fotos es un negocio. Vamos a imaginar por un momento que sin dar ninguna explicación subimos estas fotos a la página web de una ONG cualquiera. Las personas que visiten la web no tendrán información sobre quiénes son estas personas, por qué van descalzas, por qué sus ropas están rotas. Son niños pobres. Necesitan ayuda. Apretemos el botón de donar. Listo. Sin involucrarnos más. Sin más información.